lunes, 30 de mayo de 2016

¿Hablar o comunicar?

Comunicar es transmitir un mensaje y que dicho mensaje lo reciba la otra persona y reaccione de alguna manera (que piense, responda, se aleje, se acerque, se ría, etc.).

Es importante tener en cuenta que:

A veces yo no veo la respuesta (si se trata de pensamientos o sentimientos), la respuesta puede ser diferente de la que yo quería.

La comunicación da buenos resultados y facilita y mejora nuestras relaciones, cuando podemos compartir nuestros sentimientos, pensamientos y creencias.
Cuando somos capaces de contactar con la otra persona.

Para lograrlo, necesitamos estar atentos a las palabras, gestos, necesidades e intereses de la otra persona.

Cuando esto no sucede, hablamos, no comunicamos y los resultados son superficiales.

Comunicamos con nuestras palabras, tono de voz, el silencio, la mirada, la postura de nuestro cuerpo, caricias, etc.

La comunicación puede ser:


  • Verbal (lo que decimos).
  • Corporal o no verbal (cómo lo decimos).



¿Te has dado cuenta, cuantas veces una persona da un mensaje con sus palabras y uno completamente diferente con su cuerpo?

Imagínate que estas en una reunión y tú invitado principal está muy callado.
No come, no bebe y tiene cara de enojado.
Le preguntas que si le pasa algo y te contesta que no, pero muy cortante.
Le preguntas si está enojado y te dice que está muy contento, con el mismo tono de voz.

¿A que mensaje le haces caso?
¿A sus palabras, que te dicen que está bien o a su actitud que te dice que algo le molesta?
Te está enviando mensajes opuestos.


¿Lo has hecho tú?
¿Te lo han hecho a ti?
Esto es algo que nos pasa a todos. Provoca problemas en ambas personas.


Con frecuencia, el que envía el doble mensaje:
No se da cuenta de que su conducta aumenta o provoca nuevos conflictos o ni siquiera está consciente de este doble mensaje.


El que lo recibe:

Capta los dos y no sabe a cual hacerle caso.

Se da cuenta sólo de uno de ellos y su respuesta es contraria a lo que el otro espera.

Saca sus propias conclusiones, que a veces ni siquiera tiene algo que ver con lo que está sucediendo.

Trata de recordar algunas situaciones en donde tú envías un doble mensaje y otras en las que lo recibes.

Si te cuesta trabajo hacerlo, pon más atención cuando existe una fricción entre otras personas y tú, porque esta situación puede ser una de las causas.


Cuando tengas duda sobre los mensajes que estás recibiendo o sobre lo que te quieren decir, pregunta.
Aun si te cuesta trabajo.
Pero hazlo sin atacar al otro.
Simplemente diciendo: "no me queda claro…en tus palabras percibo…pero en tu tono de voz, postura, etc., veo…
Habla desde la primera persona: YO. Yo siento, yo creo.


Cuando te reclamen o critiquen por ser poco claro, no te enojes.
No te pierdas en la molestia de la crítica, porque te va a generar más malestar y mayores conflictos.
Analiza si estás dando dos o más mensajes y ve por qué lo estás haciendo.
Utiliza la crítica o comentario, para aprender y mejorar.


Cuando recibimos o damos dobles mensajes con frecuencia o con una relación importante, es necesario hablarlo.
Hazlo todas las veces que sea necesario.
Para aclarar, no para atacar o criticar.
Pero en el lugar y momento adecuado.


Fuente: http://www.crecimiento-y-bienestar-emocional.com/problemas-comunicacion.html 

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